Baja de imputabilidad: ¿cuál es el perfil de los adolescentes en conflicto con la ley en el país?

El ministro Germán Garavano confirmó que enviará al Congreso un proyecto en 2018 para establecer un nuevo régimen penal juvenil. Qué dice el decreto de la dictadura, cuál es la situación de los menores privados de su libertad y qué planea el Gobierno.

El ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Germán Garavano, confirmó que impulsará un debate legislativo sobre un nuevo sistema penal juvenil -que incluiría la baja de edad de imputabilidad a 14 años- luego de las elecciones de este año. Tres claves que te van servir para entender el tema:

¿Qué dice la ley hoy?

En la Argentina, según el Régimen Penal de Minoridad promulgado en 1980 durante la dictadura militar, los adolescentes menores de 16 años no son punibles, es decir, no pueden ser juzgados e ir presos a una cárcel.

Sin embargo, “la ley tiene una trampa: dice que si el menor de 16 años es pobre o presenta problemas de conducta, el juez puede decidir internarlo en un instituto penal el tiempo indispensable que crea necesario”, explicó a Chequeado la ex asesora general de menores de la Ciudad, Laura Musa. Esto genera, en la práctica, que varios menores de 16 años se encuentren privados de su libertad sin que hayan tenido un juicio previo.

En el caso de los adolescentes de 16 a 18 años, son plenamente punibles ante la ley aquellos que cometan delitos con penas mayores a dos años pero recién a los 18 pueden empezar a cumplir su pena en una cárcel. Hasta ese momento, estos menores pueden estar privados de su libertad en institutos especializados o centros cerrados.

¿Cuál es la situación de los adolescentes en todo el país?

Según el último relevamiento realizado en 2015 por la Secretaría de Niñez y Adolescencia de la Nación y Unicef, en la Argentina hay 871 menores privados de su libertad en centros cerrados, alcaidías y comisarías, el 22,3% del total de adolescentes en conflicto con la ley. El resto se encuentran, sobre todo, bajo programas de supervisión estatal donde los jóvenes cumplen las medidas judiciales en su entorno familiar y comunitario.

Al analizar la distribución de esos 871 jóvenes privados de su libertad por edad, el 90,6% tiene entre 16 y 17 años, y el 9,4% corresponde a chicos considerados no punibles según la ley argentina. “En este sentido, la baja de la edad de imputabilidad implicaría un cambio efectivo en la situación de 82 chicos menores de 16 años privados de libertad en todo el país”, criticó Unicef en un comunicado.

A esto se deberían sumar, claro, los casos delictivos de adolescentes menores de 16 que son declarados inimputables por la Justicia, pero “ese dato oficial no existe porque muchas jurisdicciones no lo transparentan y es muy difícil de medir”, explicó Garavano en La Nación pm.

Grafico

1- En este grupo se encuentran 14 adolescentes menores de 14 años.
2- Se incluyen en este grupo seis adolescentes que al momento del relevamiento tenían 13 años de edad.

Fuente: Secretaría de Niñez y Adolescencia de la Nación y Unicef Argentina.

Entre estos jóvenes y los que tienen 18 años, según el relevamiento citado, casi el 99% son argentinos, mayormente hombres, y están privados de su libertad -sobre todo- por los delitos de robo y homicidios.

¿Cómo es la situación en otros países, en la Argentina y qué planea el Ministerio?

Como señaló el diario La Nación, “en la región, la edad mínima de responsabilidad criminal va desde los siete años, en Trinidad y Tobago, hasta los 18 años en Brasil”, según datos de Unicef.

El de la Argentina es un caso particular. Si bien el país ratificó la Convención de los Derechos del Niño en 1990, que entre otros cosas exige tener un régimen penal diferente para que los menores no sean juzgados como si fueran adultos, nunca se modificó el sistema que rige desde la dictadura.

Esta situación llevó a que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenara al país tres veces en la última década. En 2013, la CIDH condenó a la Argentina en el caso “Mendoza” por haber condenado a prisión perpetua a menores de 18 años. En ese fallo, el tribunal internacional obligó al Estado argentino a reformar su actual régimen penal juvenil.

En 2009, el Senado le había dado media sanción a un nuevo Régimen Penal Juvenil. La norma establecía que ninguna persona menor de 18 años podía ser juzgada por el sistema penal de adultos y reducía la edad de imputabilidad a los 14 años para delitos con penas mayores a tres años. Sin embargo, después de dos años perdió estado parlamentario porque nunca fue tratada por la Cámara de Diputados.

El proyecto de ley penal juvenil es una de las propuestas que figuran en Justicia 2020, el programa de reforma que el ministro Garavano presentó en 2016. La Subsecretaría de Política Criminal del Ministerio realizó el año último varias actividades para comenzar a elaborar un anteproyecto y, según afirmó Garavano, el proyecto será enviado al Congreso en 2018 luego de que una comisión de expertos trabaje entre seis meses y un año. Allí se decidirá si la edad de imputabilidad se bajará a 14 años.

Esta nota contó con la colaboración de Manuel Tarricone (@ManuelTarricone).