Los árboles cumplen una función vital medioambiental y también componen nuestro patrimonio botánico. Por ello, Bomberos Voluntarios de Concepción del Uruguay estuvieron en el Palacio San José para realizar distintas tareas dirigidas a cuidar nuestras especies y también el patrimonio arquitectónico.
Se extrajeron pinos longevos, desbalanceados y secos que ponían en riesgo la estructura de construcciones históricas, los que serán reemplazados por ejemplares de la misma especie que se están produciendo en el Museo.
También se llevaron a cabo podas disciplinadoras y refaldado de copas, pero una de las acciones más significativas fue el apeo del Pino de San Lorenzo.
Un retoño del ejemplar que fuera plantado en 1942 por iniciativa de la Comisión Nacional de Museos y Monumentos Históricos, retoño – a su vez- del pino ante cuyo pie San Martin escribió el parte que daba cuenta del triunfo obtenido contra las fuerzas realistas el 3 de febrero de 1813.
El árbol histórico fue apuntalado y vinculado a un nogal próximo mediante una linga metálica y cunas realizadas con un material que amortiguará el aplastamiento de la corteza.
El Palacio San José agradece a los Bomberos Voluntarios de Concepción del Uruguay.
