El N°10 de la verdeamarelha se descargó después de ganar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos, el único título que le faltaba a su selección
La estrellas de Barcelona no se conformó con ganar el título en los Juegos Olímpicos Río 2016, sino que salió a responderles a todos los periodistas e hinchas que los criticaron en el último tiempo. Así, con una frase parecida a la que Diego Maradona le dedicó a la prensa argentina después de clasificarse al Mundial 2010, aunque un poco más light, el líder del equipo se despachó: «Hablaron de nosotros y respondimos con fútbol. Es una de las cosas más felices que sucedieron en mi vida. ¿Qué se le va a hacer? Ahora me van a tener que tragar», declaró Neymar en el campo de juego, donde también había marcado el gol de su equipo durante el desarrollo del partido y había festejado diciendo «acá estoy yo, hoy y acá estoy yo».
Pero la declaración más fuerte del brasileño llegó inmediatamente después: renunció a ser el capitán de Brasil en el ciclo de Tite, que comenzará en la próxima doble fecha de eliminatorias. No llegó tan lejos como su amigo Lionel Messi, que directamente renunció a la selección (aunque luego se desdijo), pero la señal fue fuerte. «Entrego la cinta. Ha sido un honor ser capitán, pero a partir de ahora dejo de serlo. Tite (el técnico de la selección mayor) puede buscar a partir de ahora otro capitán», anunció. Ahora, ¿dará marcha atrás como Leo?
Neymar asumió la capitanía de la selección en septiembre de 2014 por decisión de Dunga. El por entonces entrenador de Brasil le sacó la cinta a Thiago Silva, quien se opuso a patear un penal en la definición ante Chile durante la Copa del Mundo. En ese momento, el central criticó a su compañero por no haberle avisado del cambio. Ahora, la situación es diferente: Neymar, en su momento de mayor gloria con la selección, acaba de decirle al mundo que deja la cinta vacante.