Hay seis millones de personas de más de 65 años que podrían beneficiarse de la vacuna, pero la cobertura es muy baja; la Sociedad Argentina de Infectología lanzó una campaña
Hay seis millones de personas de más de 65 años que podrían beneficiarse de la vacuna, pero la cobertura es muy baja; la Sociedad Argentina de Infectología lanzó una campaña
Con espíritu docente, Gustavo Lopardo, consultor del Departamento de Infectología del Hospital Bernardo Houssay y profesor de Enfermedades Infecciosas de la UBA y el Cemic, muestra la imagen de una radiografía pulmonar. Hacia la derecha, interrumpiendo la mancha negra que dibujan las cavidades llenas de aire, se observa un área blanquecina.
«Esta mancha es la neumonía -dice el especialista, y deja pasar unos instantes-. Y este señor era mi padre hace veinte años. Él se recuperó, pero podría haber corrido peor suerte». Según las estimaciones, al año de padecer este cuadro, la mortalidad en adultos asciende a casi el 38%. «Entre los mayores de 65, a los 14 días, el 12% están muertos, y a los doce meses, casi uno de cada dos tiene el mismo desenlace», subraya, para dar a entender que la neumonía no es una enfermedad banal.
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La cifra es preocupante porque se calcula que todos los años se registran en el país unos 150.000 casos en adultos. Teniendo en cuenta que ,si bien existen antibióticos para tratarla, la letalidad no varió en los últimos 50 años, el país incorporó en 2017 un esquema secuencial de vacunación para adultos con factores de riesgo y mayores de 65 que se suma a la indicación para menores de dos años.