El sábado, en Vélez, jugarán otra vez contra Nueva Zelanda, a quien nunca vencieron; el deseo de los jugadores y qué cosas no deben repetir para hacerles frente una vez más
Tras la gira por Oceanía, los Pumas ya se enfocan en los All Blacks, su nuevo objetivo. Nueva Zelanda se consagró campeón del Rugby Championship y visitará el estadio de Vélez sin la necesidad de un resultado, pero como siempre con la idea de imponer un estilo en cada lugar que visita. Para la Argentina no será un partido más. No sólo por ser el último del año en el país, sino además por tratarse de un rival que les quita el sueño a los jugadores: la obsesión de conseguir un triunfo ante los hombres de negro se vuelve ya un tema de análisis para el plantel argentino.
Las frías estadísticas entregan 23 partidos jugados entre ambas selecciones, con 22 triunfos de los de negro y sólo un empate. Aquel partido que los Pumas igualaron 21-21 en el estadio de Ferro, o como marcan las crónicas de Nueva Zelanda: «Hugo Porta 21-All Blacks 21». Fue la jornada en la que el ex número 10 argentino marcó todos los puntos. Pero más allá de aquel resultado, los Pumas estuvieron cerca en otras oportunidades. Quizás aquel 1° diciembre de 2001, cuando cayeron 24-20 fue la vez que más se aproximaron en el resultado.
Lo cierto es que el sábado, a las 19.10, se medirán una vez más en Vélez y la Argentina deberá corregir varios aspectos si quiere hacerles frente a los All Blacks. «No son suficientes jugar bien 50 o 60 minutos… ellos tienen los 80 a la misma intensidad, se dan cuenta de todo, te encuentran agujeros, te van marcando en cada oportunidad, te desgastan mentalmente», analiza Juan Manuel Leguizamón, ausente en el encuentro de hace algunas semanas en Hamilton por una lesión. Se perfila para ser titular, tener su décimo partido ante los actuales campeones del torneo, y remarca: «Necesitamos crecer y madurar mentalmente para jugar un partido de esta envergadura».
«Cada partido contra los All Blacks es intenso… tendremos que ajustar muchas cosas, mejorar sobre todo en defensa y estar todo el partido con la misma intensidad», remarca el platense Joaquín Tuculet. El fullback argentino, presente en cinco oportunidades ante Nueva Zelanda, siente que al equipo todavía le falta corregir detalles adentro de la cancha, cosas que los hombres de negro trabajan a la perfección a lo largo de los años.
Por eso para hacer historia y conseguir el primer triunfo, los Pumas sienten que deberán tener un partido perfecto, algo por demás complicado ante semejante rival, que hoy está varios escalones por encima del resto. Sólo así podrán conseguir ese tan esperado resultado, el que todos en el interior quieren llevarse. Hacer historia.
«Me encantaría ganarles… sueño con ganarles, pero es sumamente complejo. No es un partido más, pero en la cabeza de uno siempre está ese sueño», remarca Leguizamón. «La sensación de hoy es empezar a darnos cuenta de que estamos creciendo, que durante algunos pasajes del partido podemos someter a los All Blacks y depende de nosotros dar el cambio, jugar mejor», señalóSantiago Cordero, quien en Nueva Zelanda marcó, en el inicio del partido, el único try argentino.
El ex Regatas de Bella Vista, quien estará jugando su cuarto partido ante los hombres de negro, agregó: «Personalmente, quiero ser de los primeros en ganarles a Nueva Zelanda. Creo que de a poco se van achicando las brechas… nunca le habíamos ganado a Sudáfrica y lo hicimos dos veces en un año. Igual sabemos que será difícil, y tengo miedo que nos vuelva a pasar lo mismo que en los últimos partidos, eso de jugar 60 minutos y bajar los brazos. Quiero que eso se acabe».
«Nunca se le pudo ganar, hacerlo sería histórico. Cada vez siento que estamos más cerca, por momentos en un nivel parecido… pero obvio que con eso no nos alcanza. Se que en cualquier momento va a venir. Sueño con eso, con ganarles algún día. Ojalá se nos de», dice Joaquín Tuculet.
Los Pumas, con Jerónimo Bello
Varios integrantes del plantel argentino pasaron por el hospital Austral, donde está internado el rugbier Jerónimo Bello, quien hace algunos días sufrió una grave lesión en el partido SIC-Newman, donde terminó con el desplazamiento de dos vértebras tras golpearse en un scrum. El primera línea fue operado y continúan esperando su evolución, que necesitará de varias semanas.
Dos ex jugadores del SIC, como Juan Manuel Leguizamón y Guido Petti, fueron a visitarlo al sanatorio. Si bien no pudieron ingresar al cuarto a verlo, estuvieron con la familia, los padres y hermanos. «Fuimos a brindar energía positiva, es un momento en el que tenemos que estar todos juntos», contó Leguizamón.
Junto con ellos dos estuvieron Tomás Lezana y Tomás Cubelli, además de Diego Tyslak, el manager del equipo argentino
