Marcelo Maller
La de mañana será una noche para los enamorados. O para los chicos que hacen del asombro, un juego. Es que cuando miren al cielo, el domingo por la noche, tal vez con música de fondo, se encontrarán con una Luna especial, llena, blanca y más brillante de lo habitual. Y la más cercana a la Tierra en los últimos 69 años.
«Veremos a la Luna un 7% más grande del promedio. La diferencia será sutil, pero real», le comentó Mariano Ribas, coordinador del divulgación científica del Planetario de la Ciudad de Buenos Aires, a Clarín. La distancia, en esta ocasión, será de 356.512 kilómetros cuando en general se ubica a unos 384.000 kilómetros.
En el momento de mayor acercamiento, el satélite natural se verá desde la Tierra un 14% más grande y 30% más brilloso, pero acá ya será de día: será a las 8.24 del lunes.
Quienes saldrán a un balcón o terraza o se sentarán en una plaza o en el campo a disfrutar del momento deberán hacer un lugarcito en su memoria ya que este fenómeno no se repetirá hasta dentro de 18 años.
Por eso Noah Petro, geólogo planetario de la NASA, dijo que «la gente debe entusiasmarse, debe salir y disfrutarlo». Aunque este científico, uno de los que está a cargo de la sonda espacial que está orbitando a la Luna, afirmó que ni siquiera él se daría cuenta de la diferencia en la luminosidad de la Luna. «No es tan raro porque la diferencia es inapreciable a simple vista», agregó Ribas en esta parte del mundo.
La última vez que ocurrió este fenómeno fue en enero de 1948, cuando la Luna incluso pasó 47 kilómetros más cerca de lo que lo hará mañana por la noche y el lunes en la madrugada. En el 2034, es probable que la Luna se acerque aún más y también para esa fecha se la verá más resplandeciente de lo normal.
“Le dicen ‘Súper Luna’ pero en realidad se la llama Luna en perigeo porque coincide que es llena y está a la mínima distancia de la Tierra”, explicó Ribas, y confirmó que “para verla no hace falta telescopio ni otro instrumento”.
Claro que todo dependerá del clima, y hay algunas dudas al respecto. En Capital Federal, se espera para la tarde del domingo que el cielo esténublado a parcialmente nublado, con baja probabilidad de chaparrones aislados. Aunque hacia la noche la perspectiva es que las condiciones tiendan a mejorar y el cielo podría despejarse.
Entonces, como dijo Petro, todos podrán ver la Luna: «Es un recurso en común que tiene toda la humanidad». Algunos lo tomarán como un guiño cómplice. Otros, seguramente, lo disfrutarán con corazón de niño.